2 de agosto de 2011

¿El destino?

Cuánto nos puede sorprender,
como puede hacer girar la veleta de la vida,
la veleta de nuestra vida, de mi vida.

Si, es cierto que me llegué a dar por vencida,
es cierto que llegué a tirar la toalla y a limitarme a llorar,
es cierto que no he sido buena persona en muchos momentos,
es cierto que he hecho cosas que no tendría que haber hecho,
me he portado como una niña pero ¿Ahora qué mas da?

Parece que después de merecerme todo lo malo de este mundo,
después de haberme fustigado lo suficiente,
después de haber aprendido a pasar de las opiniones ajenas y de gente puñetera,
el destino me ha vuelto a sonreír.

De tal manera que ahora no puedo permitirme pifiarla,
no puedo permitirme ser una persona que no soy,
no puedo permitirme hacerle daño a el,
no puedo permitirme cometer errores que pueden ser fatales,
no puedo permitirme que otras personas se metan en mi vida.

Total, eso es lo que me llevó a cagarla,
primero por desmelenarme y no comportarme como debí de hacerlo
y luego por no saber actuar y dejar que otras personas lo hicieran por mi.

Todo eso ya ha pasado a un segundo plano,
ahora me centro solo en el, su sonrisa, su ser y en ser yo misma y relajarme. 


Laura Rivas Alvarez.

2 comentarios:

  1. Holis... aca me paso!!!

    podria haber jurado que esta entrada ya la habia comentado...

    pero bueno aca estoy de nuevo...

    BsS!!! espero verte por mi blog...

    ResponderEliminar
  2. Gracias por pasarte!! yo juraría que no, que había sido una anterior jajajaja pero igualmente no pasa nada, besitos!!!

    ResponderEliminar